La dirección asistida o dirección hidráulica es un elemento fundamental para garantizar el buen funcionamiento de cualquier vehículo.
Este elemento es uno de los más importantes para garantizar la seguridad de un vehículo y es la encargada de transmitir al piloto precisión y sensación de suavidad.
Sin la dirección asistida, conducir cualquier vehículo especialmente en baja velocidad, sería una tarea muy pesada pues el volante estaría muy duro para girar y tratar de estacionarte o hacer maniobras en espacios reducidos fuera casi imposible.
El automático fluido de transmisión (ATF) es un líquido de color rojo que libera un olor dulce distintivo, mientras que el liquido de Dirección asistida (Power Steering) es un fluido es transparente, ámbar o rosado y huele a malvavisco quemado. Ambos son fluidos hidráulicos. Pero, la mayor diferencia es, ATF contiene detergentes y modificadores de fricción que trabaja a menor temperatura que el Power Steering.
El sistema de dirección hidráulica genera mayores temperaturas de trabajo que el sistema de transmisión automática. Por ende, no es lo mismo usar ATF para la dirección hidráulica, por lo que recomendamos usar POWER STEERING para sus sistema de dirección.